Conocido hasta hace muy poco tiempo como el Torreó de l’Indià, recientemente ha cambiado su nombre para adoptar el del hotel donde está alojado, Villa Retiro.
El restaurante, bajo la dirección del chef Francesc López ofrece una cocina de autor, siempre con productos frescos, con predominio de los ingredientes marineros y sin olvidar nunca el punto de partida, la cocina tradicional catalana de la zona del Delta del Ebro, El entorno del hotel-restaurante es relajado y tranquilo, ideal para olvidar las prisas y el estrés diario.
Entre los platos más destacados, podemos citar el arroz cremoso de bogavante y vieiras, el huevo de pato cocido al vapor con trufas, colitas de rape marinadas con puré de remolacha y chips de ajo, o los riñones de cordero con alcachofas glaseadas y caracoles.
Como curiosidad, mencionar que aparte de la carta de vinos tienen otra de aguas minerales, que detalla todas las características de cada opción.
