La Plaza Real de Barcelona está ubicada en el Barrio Gótico lindando con La Rambla. Es una plaza pública de forma trapezoidal construida por el arquitecto Daniel Molina en estilo neo-clásico durante la segunda mitad del siglo XIX.
La define un rasgo peculiar, y es que su habitual ritmo es trastocado cuando se realizan pequeños cambios en los espacios entre sus columnas que dan la impresión que es cuadrangular. Molina tuvo la perspicacia de crear pasajes que conectan las calles de la estructura medieval que había sido cortada por la plaza. Antonio Gaudí fue quien diseñó las farolas que se encuentran en su centro.
Hoy en día cuenta con mucha vida nocturna gracias a los numerosos bares, restaurantes y discotecas de su alrededor que aseguran que esta plaza tenga movida en todo momento del día.