El restaurante hindú Surya recrea en su local de la calle Pau Claris la energía bulliciosa y positiva de la India. La decoración, exuberante, se inspira en los colores de las calles de Mumbai (antes llamada Bombay) y en el local, procedente de la cocina, flota un aroma que también recuerda el emanado por los numerosos puestos de comida clandestina de las abigarradas calles de esta ciudad.
Cocina popular pues, exótica por su origen y deliciosa por el cuidado con que la preparan. Los precios son asequibles y el servicio atento. Disponen de una carta muy divertida y extensa que nos detalla las comidas típicas de la India, explicando los ingredientes que componen los platos.
Una cena en el Surya podría comenzar, por ejemplo, con una rayata o un hummus nan, o tal vez con unas verduras rebozadas con harina de garbanzo, y seguir con unas pakoras de gambas y calamares o pollo o cordero Korma.
Un restaurante donde la autenticidad prima sobre la sofisticación, alternativa completamente válida.