Una de las playas más nuevas de Barcelona, con una extensión de 300 metros es la playa de Llevant. Inaugurada en el año 2006, como tal, se produjo una adecuación de la zona para que fuese más accesible , y a la vez, más adaptada para los bañistas. Siendo la playa más al norte de la ciudad de Barcelona, y que delimita con la popular playa de la Mar Bella, es a la vez la playa más tranquila, por lo que nos permite relajarnos y pasar un buen rato tanto en compañía de amigos o de manera más familiar.
Como todas las playas urbanas, está dotada de todos los servicios necesarios, como el alquiler de sombrillas y tumbonas, así como chiringuitos que nos proporcionan desde cualquier helado o refresco a una gran variedad de platos ligeros para comer.