El antiguo barrio del Mercadal es un pueblo tradicional en la ciudad de Barcelona, un lugar de solidaridad donde las familias y los vecinos se prestan una mano como si fueran uno.
Cuenta con dos magníficas plazas, Orfila y Mercadal, además de la grandiosa plaza del Comerç, cada una atravesada perpendicularmente por la calle de Sant Andreu de tal manera que crea un eje imaginario. El lugar donde estas dos plazas se unen es considerado el corazón del barrio. En esta intersección está el mercado local y la Iglesia de Sant Andreu de Palomar.
Es un pequeño cuadrado que funciona como un mercado, manteniendo la fisonomía del resto del pueblo, rodeado de un pórtico que bajo sus arcos funcionan comercios y empresas locales.
Un barrio con un rico pasado agrícola y comercial que invita a dar un paseo para explorar sus costumbres y tradiciones.