El Museo Marítimo de Barcelona se encuentra en el edificio de las Atarazanas Reales de Barcelona, que durante los siglos XIII y XVIII fue un lugar dedicado a la construcción de navíos, ya en el año 1243, se hace mención de una de las atarazanas en un documento que donde se señalaban los limites de Barcelona.
Con fecha 23 de octubre de 1936 y por un decreto aprobado por la Generalitat de Catalunya, se creo este museo, aunque años atrás y aprobado por la Junta del Patronato del Instituto Náutico del Mediterráneo, ya se había dado luz verde para la creación del museo marítimo así como de una biblioteca naval, debido a que la Escuela Náutica de Barcelona, fundada en 1769, disponía de una extensa colección de modelos y de instrumentos que recibían el nombre de Gabinete Naval. Siendo esta la colección que acabaría siendo la base del museo que se tenia en mente crear y que con la entrega de las Atarazanas a la ciudad de Barcelona, a causa del abandono de las instituciones militares que lo residían, hizo posible que este edificio fuese destinado al uso de museo.
Durante la guerra civil de 1936, debido a los fuertes bombardeos y ataques que sufrió la ciudad de Barcelona, se tomo la decisión de evacuar las piezas de mas valor y trasladarlas a Mas Figarola, situado en la población de Seva, en el Montseny.
Debido a estos sucesos acontecidos a causa de la guerra y el posterior cambio de régimen hicieron imposible que el museo abriera sus puertas al publico, hasta que por fin en el año 1941, se pudo inaugurar ya con el nombre de Museo Marítimo de Barcelona.